La vacunación y las toxinas de los medicamentos
Aquí daré una explicación sobre las toxinas hereditarias.
Las toxinas adquiridas son, aquellas que se introducen al cuerpo después de nacer.
Las hereditarias son aquellas que se transmiten de generación en generación
desde nuestros antepasados. Se reciben durante la gestación. Un refrán japonés
dice: No hay nadie sin presunción ni sin toxinas”. En la medicina moderna se
denominan Toxinas menos hereditarias. Son toxinas de los medicamentos que ya se
han vuelto viejas, por lo que sin falta surge un proceso de eliminación. Y eso
es la viruela. Debido a la ignorancia de la razón mencionada, en 1796 el
científico inglés Jenner, descubrió la vacunación que liberaría a la humanidad
de la viruela e inclusive hoy, la humanidad lo sigue adorando y le está
agradecida como si fuera el mesías.
Habría que saber que las toxinas de la viruela no se han extinguido con la vacunación. Sólo se ha disminuido la fuerza para eliminar las toxinas acumuladas hereditariamente, por lo que dichas toxinas quedan en el cuerpo como antes y se convierten en patogénesis de distintas enfermedades… Como los seres han sido saturados de medicamentos durante varios siglos, pasarán al menos dos o tres generaciones para acabar con la viruela por completo…la gente en general, no tendrá necesidad de eliminar la vacunación de un solo golpe, sino que si una sola generación deja de consumir medicamentos, la siguiente sufrirá mucho menos y a partir de la siguiente dejará de sufrir. La vacunación sólo puede ayudar a que la viruela no deje cicatrices en la piel y afecta a otras cosas en gran medida. El problema está en las inyecciones…” MOKICHI OKADA ( japonés 1953)
